lunes, 13 de agosto de 2012

"El Agua del Obispo"


A escasa distancia de Hualqui, junto al río Bío Bío y a orillas del camino que conduce a la vecina ciudad de Chiguayante, se encuentra un lugar que recibe este singular nombre. Fue en tiempos pasados detención obligada de los viejos ferrocarriles a vapor que debían abastecerse de agua. El viajero que venía en tren por primera vez a Concepción, contemplando extasiado la plácida majestad del río, se sorprendía cuando de pronto el conductor avisaba: “¡El Agua del Obispo!”. ¿ De dónde viene este nombre tan curioso?

Monseñor Reinaldo Muñoz Olave en su libro “Rasgos biográficos de Eclesiásticos de Concepción, 1552-1818”, al hacer la biografía del Obispo de La Concepción don Francisco José Marán, que gobernó desde 1780 hasta 1795, recuerda un episodio que ocurrió cuando el prelado volvía a la diócesis: Dice el historiador: “ Después de una ardiente jornada de verano, hizo alto con su comitiva en un paraje poco distante del pueblo de Hualqui para tomar un corto descanso bajo el ramaje de algunos corpulentos robles que ofrecían amigable sombra. A la vista de los viajeros se extendía un hermoso panorama: el Bío Bío en una de esas rápidas y caprichosas vueltas que le obligan a dar los cerros entre los cuales corre aprisionado...” “Junto casi a la comitiva brotaba una fuente de agua cristalina y pura que de solo mirarla se hacía apetecible, y tanto más cuanto que, con el suave murmullo que la corriente producía entre las piedras, se ofrecía espontáneamente llamando la atención de los viajeros fatigados por la marcha y el calor. Acercose el obispo a beber de aquella agua con tal fruición que exclamó: ¡ Bendito sea Dios, que en su sabiduría supo dar tal majestad y belleza a estos encantadores paisajes y bendito sea porque en su bondad le dio a la tierra tanta fecundidad para producir de sus entrañas este purísimo manantial...y levantando su diestra en alto y con voz grave y reposada (dijo): - ¡ Bendiga el cielo esta fuente, así como la bendigo yo en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu santo !.” Esta es la historia que supieron los vecinos y la contaron a su saber y entender. Esta es la historia del “Agua del Obispo” relatada por otro obispo. Y para aquellos que visitan nuestra Comuna y deseen encontrar a orillas del camino aquel manantial cristalino, sólo deben mirar hacia lo alto del cielo pues allí nace.



6 comentarios:

  1. Excelente relato, muy interesante, felicito su dedicación, saludos desde san pedro de la paz.

    ResponderEliminar
  2. Crecí escuchando, estas leyendas. Gracias, por ponerla en Internet. Saludos!

    ResponderEliminar
  3. Sera ese chorro de agua de una pequeña cascada que esta, en la via ferrea a mitad de camino de Chiguayante a Hualqui???

    ResponderEliminar
  4. Sera ese chorro de agua de una pequeña cascada que esta, en la via ferrea a mitad de camino de Chiguayante a Hualqui???

    ResponderEliminar
  5. Bendita tierra de manquimavida el que vive allí jamas morirá de hambre ya k sus tierras son tan fertiles mis tatara abuelos vivieron y pasaron la pandemia de 1918 y nunca les falto el pan.

    ResponderEliminar